Una mujer que sueña su propio Destino

 Desde los abstracto, hasta lo figurativo, desde la búsqueda de imágenes donde las gamas cromáticas se despliegan en todas sus dimensiones dándole vida a cada creación, cada pieza transmite una afirmación de la existencia desde lo plástico, trascendiendo la imaginación creadora que hace que las formas se impongan como realidades en sí. Como una invitación a reflexionar sobre la vida y la presencia de la mujer en medio de la realidad social, la exposición Destinos de la artista cubano-belga Geladis Pérez Martínez, quedó inaugurada en la Galería de Arte Uver Solís del municipio de Jovellanos .

Reconocida internacionalmente como la Frida Khalo de Cuba, la obra de Geladis está llena de ella misma, en cada pincelada hay parte de su propia existencia y se aprecian sentimientos desgarradores, esperanzas, nostalgias.  La joven artista, de formación autodidacta, se adentró en el mundo de las artes plásticas con su primera serie denominada Tabúes, donde el público tuvo la oportunidad de constatar su sufrimiento tras una etapa oscura donde estuvo sometida a la violencia física y psicológica.

Posteriormente, su segunda entrega fue “Pasión”, la cual reflejaba una nueva etapa de su carrera y de su devenir llena de sueños y esperanzas. En la actualidad la Expo “Destinos”, que estará abierta al público hasta el mes de agosto, marca la madurez de Geladis en el mundo de la plástica, esta vez desde sus vivencias como madre y demostrando que “a pesar de las tristes experiencias vividas, nunca ha dejado que nada ni nadie endurezca su corazón”.

“Durante mucho tiempo traté de conocerme, de descubrir mi propio yo, lo buscaba sin saber que hacía mucho tiempo lo había encontrado, hoy sé que a los 19 años pinté mi primera inquietud (…) Sin los colores, no soy nada, no soy nadie”, afirmó Geladis Martínez durante la inauguración de la muestra.

Con exposiciones en Holanda, Portugal, Bélgica y Alemania, la artista jamás olvida su tierra cubana y en especial al municipio de Jovellanos, donde realizó importantes contribuciones para ayudar a la restauración de la galería de arte Uver Solís.  Su obra, deviene espacio de reflexión en medio de nuestro siglo, donde la mujer aún es víctima de flagelos como la explotación y la discriminación. En ella, en su sencillez y sensibilidad , el público encuentra fortaleza y motivos para seguir adelante.