jueves, 1 de diciembre de 2016

Yo soy Fidel



Por Jeidi Suárez García y Lianet Fundora Armas

Fotos: Ramón Pacheco Salazar y Abel López Montes de Oca
 

 “Mientras el pueblo reía hoy, mientras el pueblo se alegraba, nosotros nos preocupábamos; y mientras más extraordinaria era la multitud que acudía a recibirnos, y mientras más extraordinario era el júbilo (…), más grande era nuestra preocupación, porque más grande era también nuestra responsabilidad ante la historia y ante el pueblo de Cuba". Concluía el recorrido de la Caravana de la Libertad y Fidel declaraba con estas palabras el compromiso  de la Revolución.
Cincuenta y siete años después, los cubanos se reúnen para recibirlo,esta vez no bajo el impulso de la alegría, sino marcados por un dolor compartido ante la desaparición de quien cumpliera aquella promesa.

Desde su entrada por el poblado de Ceiba Mocha, el cortejo fúnebre avanzó entre la multitud conmovida que desde temprano se adueñó de las arterias principales. Diferentes generaciones manifestaron así su gratitud al hombre que encarnó el alma de la nación, sin importar cuán altos fuesen los sueños.
Más allá de La Atenas de Cuba, el desplazamiento continuó hasta Coliseo, para después tomar una vía secundaria hasta Cárdenas y transitar frente a la casa natal de José Antonio Echeverría, allí donde el Comandante abrazó a la madre del líder estudiantil aquel enero de 1959.
Luego, tras retornar a Coliseo, la caravana siguió su paso a través de otros territorios de la carretera central, hasta que el poblado San Pedro de Mayabón la viera alejarse de la provincia en su itinerario hacia Santiago de Cuba.
Sin embargo, más allá del adiós definitivo, los matanceros no olvidarán aquel instante en que unos minutos no bastaron para abrazar surecuerdo. Detenidos en el tiempo muchos lo vieron desde los versos de Carilda, sobre un tanque blindado defendiendo las arenas de Girón, o sosteniendo en sus brazos al niño Elián.
Todos saben que una urna de cedrono basta para guardar su esencia, esa que se multiplica hoy en tantas voces bajo una misma frase: “Yo soy Fidel”.

 

 
 
 


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